Su padre trabajaba en la compañía de tranvías de Alicante. Residían en el número 27 de la calle Villavieja. A los 5 años vivió una experiencia aterradora cuando presenció una explosión en una armería cerca de su casa que acabó con la vida de varias personas.

Tras varios traslados, su familia acabó estableciéndose en la calle Belando. Paco asistió al jardín de infancia Las Ferroviarias. Luego prosiguió sus estudios en las Escuelas Salesianas.

Ya desde su juventud se convirtió en un asiduo de la Semana Santa alicantina. Participó en diferentes años de costalero o nazareno.

Antes de poder terminar la secundaria, Paco se ve obligado a ponerse a trabajar para ayudar económicamente a su familia. Su primer empleo fue en la fábrica de cocinas Luria. Tras 4 años aquí, comienza a trabajar para la Farmacéutica Alicantina. Tras pasar un tiempo aquí, es llamado para realizar el servicio militar en Rabasa y luego en Benalúa para trabajo en oficinas.

Al terminar la mili comienza a trabajar de subagente comercial, representando firmas de farmacia, textil, bebidas y otros sectores en Alicante. En 1965 se casa con María del Carmen Castaño Pérez. Al año siguiente nacería su primer hijo, también llamado Francisco. Vivía con su nueva familia en la Calle Maestro Caballero.

En 1966 se separa de común acuerdo con su socio comercial Antonio Pelluch para quedarse con la representación exclusiva de la empresa de electrodomésticos Teka. Aunque cambió de oficina varias veces (primero en la calle del Capitán Dema, después en Rabasa y finalmente en la carretera a Madrid) ya nunca volvería a cambiar de trabajo. Con el paso del tiempo se le empezaría a conocer con el apodo de ‘Paco Teka’.

Su primera hija, María del Carmen, nació en 1968. Aún tendrían 2 niñas más: Rosa María (1970) y Laura (1982).

Fue el fundador de la barraca “Lo que costa fer” (plaza Gabriel Miró) en 1970. Permaneció como presidente de la misma durante 30 años.

En 1980 asiste a una reunión de padres del Instituto Miguel Hernández (donde estudia su primogénito Paco) donde acuerdan crear un nuevo equipo de baloncesto. Paco Pastor se compromete a fundarlo y organizarlo, para que así su hijo y sus compañeros puedan practicar su deporte favorito.

Tras unos pocos años, el equipo se desliga del instituto y pasa a llamarse CB Miguel Hernández. Paco Pastor consigue el patrocinio de Teka, por lo que el club puede permitirse mantener un equipo senior, así como varios niveles de canteranos.

Poco a poco, el Miguel Hernández va logrando logros deportivos: Campeón Provincial en categoría junior y Campeón Autonómico (1986). Paco va creando un organigrama y organización de equipo deportivo serio. En 1988 consiguen ascender a Segunda Nacional. Pastor pone sueldos a los jugadores, por primera vez en un equipo de baloncesto de Alicante.

Organiza también un modelo de cantera y red de fichajes inéditos en el baloncesto alicantino. Dicha infraestructura comienza a dar sus frutos, y los mejores jugadores de la provincia vienen a jugar al Miguel Hernández, así como de otras partes de España.

Durante esta etapa, Pastor fue también vicepresidente del Hércules en la directiva de José Torregrosa, desde 1986 a 1988. Además, en 1990 se estrenó como foguerer en la hoguera Monjas-Santa Faz (Plaza de la Santísima Faz), hoguera la cual también presidía su comisión.

En 1994 se crea la liga EBA. El Miguel Hernández no es invitado a jugarla, pero Paco Pastor presiona y acaba consiguiendo su entrada. El club debe de profesionalizarse, por lo que Pastor decide refundarlo con el nombre de “CB Lucentum”. Para lograr afrontar la cantidad de dinero suficiente para la profesionalización y el canon, consigue convencer a otros 11 socios para que  entre todos avalen con su patrimonio personal un préstamo bancario. Consigue además el patrocinio de Ernesto Electrodomésticos.

Forma un equipo para optar por el objetivo de subir a la ACB por vez primera en la ciudad. Después de varios ascensos frustrados, al fin logran el ansiado objetivo en la 99-00 frente al Lérida.

La primera temporada en ACB fue complicada para Paco Pastor, pues el alcalde Alperi le prometió unas subvenciones que nunca llegaban. Al final de la temporada, el equipo desciende y Paco Pastor siente que está perdiendo el control económico del club en aras del Ayuntamiento.

 Por esta razón, decide dimitir de la presidencia en 2001, no sin antes devolver el dinero invertido a los 11 socios fundadores del Lucentum y poner un aval de 18 millones de pesetas de su propio bolsillo, que la siguiente directiva de Luis Castillo nunca le devolvería.

Durante los siguientes años continúo trabajando en su empresa, y siendo un asiduo de los partidos del Lucentum.

También participando en las fiestas locales. Siguió saliendo en procesiones, ejerciendo de foguerer y presidente de comisión de su hoguera, e incluso fue capitán cristiano en los Moros de San Blas en 2006. Falleció a los 77 años.

FUENTEs:

- Paco Pastor (hijo)

- Las Provincias

- Estadio Digital (http://www.estadiodigital.es)